La voz del paciente
A finales de febrero empecé a padecer una "extraña dolencia": el acúfeno. El acúfeno es en realidad un fallo cerebral. El cerebro de las personas que tienen un acúfeno en uno de sus oídos (o en ambos) hace que estas escuchen de forma constante un ruido, un pitido o un crujido inexistente en su oído, además de los ruidos que les llegan del exterior. La vida de estas personas se convierte en una pesadilla: no pueden dormir por las noches (pues el ruido en su oído les impide conciliar el sueño), no pueden mantener una conversación "normal" (el ruido impide escuchar al interlocutor con claridad), se sienten limitadas en sus actividades diarias y eso les acarrea un malestar constante y un estado de mal humor permanente.
El 24 de abril la Médica de otorrinolaringología de la Seguridad Social me dio la "extremaunción" y me dijo que "no podía hacer nada para currar esta horrible dolencia".
El 5 de mayo tuve mi primera sesión de acupuntura en la Asociación de Acupuntura Natural en Luís Piernas. Hice 2 sesiones de acupuntura a la semana. A la quinta sesión estaba "milagrosamente" curada y no sólo eso, sentía una enorme paz interior, bienestar y calma emocional.
Gracias a David y a Pilar hoy puedo tener una vida eficiente. Su trato personal y profesional han sido impecables. Ellos me han curado aquello que la medicina occidental y la química farmacéutica no pueden curar. Sólo tengo palabras de agradecimiento para ellos y para ECAN, una asociación maravillosa que le ha devuelto la dignidad a mi vida.
Gracias David. Gracias Pilar. Gracias ECAN.
Laura García
España
Me llamo Mario G. , tengo 58 años y vivo en Madrid.
Desde siempre he sufrido de Apnea, en su peor modalidad que es la “central” ya que a diferencia de la “obstructiva “no puede ser operada.
Como consecuencia de la apnea, el sueño no es reparador y aparece somnolencia diurna, presencia de fatiga crónica e incluso alteraciones respiratorias y cardiovasculares.
Visité a diversos especialistas, en particular del aparato respiratorio y después de hacerme una prueba de polisomnografía, me diagnosticaron una apnea grave.
Actualmente no existe un tratamiento farmacológico, así que en situaciones de gravedad el especialista siempre prescribirá una CPAP, que consiste en un generador de presión que transmite a través de una mascarilla nasal una presión de aire continua a la vía aérea superior impidiendo que ésta se colapse. Evidentemente, la mascarilla es incomoda y además por el ruido que realiza el aparato es muy desagradable para la persona que duerme a tu lado.
Como quiera que soy amigo de la medicina natural, exploré otras vías de tratamiento y descubrí un caso en Lérida en el que se había tratado la apnea central mediante acupuntura.
Así que acudí en Madrid a la Asociación de Acupuntura Natural donde en menos de 15 sesiones consiguieron que me desapareciera la apnea. Mi vida ha cambiado por completo.
Mi agradecimiento a los profesionales de la Asociación / Escuela e invito a todas las personas que padezcan apnea que no lo piensen dos veces y se traten con acupuntura esta enfermedad.
Mario G
Madrid - España
Me llamo Pilar y tengo 82 añitos recién cumplidos.
Me gustaría empezar resaltando la sinceridad de Pilar y David cuando fueron preguntados si podrían tratarme; honradamente su respuesta fue: no hemos tratado nunca alguna persona de esa edad tan avanzada de ahí que no podamos garantizar su éxito o eficacia.
“De entrada: son honestos, ¡me valen!
Yo sí conocía la acupuntura, en varias ocasiones anteriores de mi larga vida ya la había vivido y siempre me fue de ayuda.
Y así empezamos el tratamiento ahora hace unos 4-5 meses
Actualmente mi diagnostico médico es: enfermedad de Addison con implicación pluriglandular: hipofunción de tiroides y de hipófisis.
Diagnóstico al que se ha llegado después de unos 30-40 años en los que he vivido toda clase de aberraciones, errores, salvajadas médicas, sí, salvajadas, no puedo decir que conmigo los médicos se hayan cubierto de gloria, y lo digo con profundo dolor porque siempre fui una enamorada de la medicina, de hecho soy analista clínico y psicoanalista “alguna idea tengo del tema”.
Por fin, con la ayuda de un buen Endocrinólogo y amigo, se pudo llegar a saber que aquí partíamos del hecho de que lo que tengo es una malformación congénita de hipófisis por lo que mi sistema endocrino no ha funcionado bien nunca, empezó a dar señales de ella a la llegada de la menarquia.
A lo largo de los años se fueron sucediendo diversos cuadros clínicos, Hace años fui operada del síndrome de Stendhal: ovario poliquístico e hiperplasia de suprarrenales y al parecer desde ahí mis glándulas cayeron en la hipofunción actual de suprarrenales. No hace mucho pude ver la imagen de mis glándulas y la derecha es algo así como un pellejo vacío, tirado al suelo y pisoteado; la izquierda está perfecta, pequeñita pero bien y parece que eso es todo lo que tengo en esta materia.
Últimamente no sé si porque me fallaban los tratamientos que llevaba o porque estaba teniendo un proceso de agudización de la enfermedad –que son habituales en este cuadro clínico- el hecho es que me iba quedando lo que se dice sin vida: la astenia se agudizaba progresivamente, sin defensas, etc.etc. materialmente no podía tirar de mí
Después de tantos años y de tantas situaciones vividas, mi organismo está muy mermado, yo diría exhausto, no tolero medicación química alguna, todas mis ayudas han de ser a base de productos naturales y medicinas alternativas y eso en dosis siempre mínimas: a poquito que se le da mi cuerpo responde, lo poco lo agradece, pero si se siente forzado “da el patadon como respuesta” y me pongo mucho peor, incluso con lo natural.
De ahí que empezáramos la acupuntura con solo 1 sesión semanal y advirtiendo que fuéramos muy poco a poco.
Y efectivamente empecé a mejorar.
No hace mucho han sido mis amistades quienes me han ayudado a caer en la cuenta: “pero Pilar, ¿tú te das cuenta cómo te mueves? ¿tú sientes la energía que demuestras?”
¡”anda, pues si es verdad! ¡
No es que sea ya ni Sansón ni Goliat pero sí es cierto que efectivamente puedo certificar que, si limito mi vida a los límites que tengo ya comprobados son mis posibilidades, ese nivel de vida lo vivo con absoluta normalidad, y a mi edad puedo vivir sin tener que depender de nadie y haciéndome responsable de mi casa y mis cosas personales, incluso desarrollo algunos trabajos efectivos en servicio de sectores necesitados, para eso, -mal que me pese porque no me gusta nada- el ordenador me resulta de mucha ayuda porque puedo hacerlos en mi casa, cómodamente, a mi ritmo pero manteniéndome activa, útil y ejercitando la cabeza, algo que resulta fundamental a mi edad.
Está claro: Pilar y David con su toma de los pulsos “me han sabido tomar la medida” y su ayuda me está siendo MUY MUY MUY efectiva.
Deo gratias.
Pilar
Soy Rebeca y quería dejaros mi experiencia con la acupuntura.
Sufría de migrañas prácticamente todas las semanas por no decir a diario, algunas veces eran dolores de cabeza leves y otras tan fuertes que tenía que salir del trabajo porque no podía ni abrir los ojos, casi siempre ocurría después de algún episodio que me produjera estrés, otras veces sin razón aparente una migraña y otras asociadas con la menstruación.
Soy una persona que siempre he llevado ibuprofeno encima por si me daba un dolor y esto también me ha provocado problemas estomacales que se acentuaban con estos episodios de estrés, al final una cosa llevaba a la otra.
Hace un año decidí tener un bebe y no quería tomar ningún medicamento por si me quedaba embaraza y como los dolores de cabeza persistían, decidí probar con acupuntura natural.
Hace 3 meses que comencé un tratamiento y al poco tiempo de empezar vi que los dolores remitían asombrosamente, a día de hoy han desaparecido y tan solo algún leve dolor cuando tengo la menstruación, pero nada parecido a lo que antes me ocurría.
Creo que la acupuntura me ha estabilizado interiormente haciendo que las causas que antes me producían estrés ahora no me lo produzcan, canalizo mejor las situaciones, ya que ahora soy consciente de lo que me lo produce.
Se lo recomiendo a todo el mundo porque yo iba un tanto escéptica y realmente ha funcionado estupendamente.
He acudido también por otras dolencias como una lumbalgia y también palió los síntomas en una sesión, actualmente acudo de vez en cuando para reforzar el tratamiento.